domingo, 11 de marzo de 2012

Las Grutas 1 - Monte Hermoso 0

Este verano, luego de varios años, tuve oportunidad de volver a pasar por el Balneario Las Grutas y quedé gratamente sorprendida por la forma de su crecimiento edilicio costero: todas las construcciones se erigen bien retiradas de la línea de la playa y con una altura no superior a las tres o cuatro plantas.

Lo comparé con Monte Hermoso, localidad balnearia a la que estoy más vinculada, por afecto, por historia y por intereses, que exhibe, en cambio, una hilera despareja de edificios de hasta diez plantas, pegados unos con otros, sobre una costanera angosta, cubierta de sombras, y me surgió de inmediato el resultado que titula esta nota.


Recordé que en los albores de la autonomía monterhermoseña se había esbozado un plan regulador que no permitiría construir edificios de más de tres pisos sobre la costanera. Lamento que dicho instrumento urbanístico no haya prosperado, repitiéndose los errores que ya eran evidentes en otras ciudades marítimas, por caso Mar del Plata.
Una vez más lo urgente se impuso sobre lo importante. Lo urgente era atraer inversiones, crear fuentes de trabajo, generar movimiento comercial. A cualquier precio. Lo importante hubiera sido planificar la urbanización, mantener un estilo, establecer normas para que las nuevas construcciones no degraden el paisaje ó dejen fuera de escala y desvalorizadas a las preexistentes.



Se comenta en Monte Hermoso que se seguirían levantando edificios de gran porte en el sector céntrico, agregando habitantes y vehículos a una zona donde ya hay superpoblación de ambos, aún cuando el sistema cloacal, sobrecargado, suele aflorar mediante líquidos y olores desagradables por la mismísima calle Dufaur.

Justo es, por otra parte, contabilizar los numerosos tantos a favor en materia urbanística, como el Centro Cívico y su entorno; la nueva Rambla; las plazas; las peatonales; el ensanche de veredas, siempre y cuando se reponga rápidamente la vegetación sacrificada al realizar las obras.



Pero en el tema del tratamiento costero, a mi entender, insisto, mi querido Monte pierde el partido.

6 comentarios:

  1. Ocurre lo mismo en la mayoría de las poblaciones de la costa mediterránea. Hubo un boom de la construcción que en muchos casos no tuvo en cuenta la legislación vigente, o que incluso se permitió el pagar las multas correspondientes porque se sacaban beneficios de todas maneras.

    Los resultados son en algunos casos horribles. Los lugareños de más edad se lamentan de no reconocer ya los paisajes que vieron toda su vida. Y todo en un corto espacio de tiempo.
    El beneficio económico es que el que priva en este mundo, por desgracia.

    Me alegro de saludarla, Silvia :)

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  2. Así es, estimado Juan, priva sobre todo el beneficio económico inmediato. Se repiten errores que ya eran evidentes en otras ciudades. Me apena, particularmente, pues yo trabajé en Turismo en Monte Hermoso, hace 35 años, cuando todo estaba por hacerse y había oportunidad de hacerlo bien.

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  3. Lamentablemente, en demasiados lugares, y no sólo costeros, sucede lo mismo que en MH :(
    Quiero dejar sentado que vine a conocer tu blog porque Vix dijo que sos blogger y agregó un "cof cof" típico de hija, que me decidí a desafiar!
    Te sigo, y me quedo a leer más!

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    1. Eli, gracias por seguir mi blog. Está pendiente el tuneo que Vix iba a hacerle. Sucede que no nos pusimos de acuerdo al respecto(cof, cof). La mayor parte de los posts está dedicado a describir viajes y lugares que visito. Algunos a mostrar la "cara y ceca" de cosas que me preocupan, como en este caso.

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  4. Silvia: me pasó lo mismo que a Eli, llegué a tu blog por comentario de mi hija. Soy nueva en esto y no muy experta que digamos. Mi hija conoce el blog de la tuya y me dijo que te visitara porque hay bastante aquí que me resulta familiar. Soy de Punta Alta, aunque hace 29 años que vivo a 700 Kms pero sigo teniendo mis padres por allí. Bueno, en realidad se acaban de mudar a Bahía. Cuánta razón tenés con tus apreciaciones sobre Monte, iba de niña con una amiga y su familia a pasar los veranos, y al volver de grande pensé lo mismo: "qué moderna manera de arruinar un paisaje maravilloso". Bueno, nos seguiremos leyendo.
    Andrea

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    1. Andre: es curioso como nos relacionan las nuevas redes sociales. Soy nativa de Bahia Blanca, aunque hace más de 30 que vivo en Punta Alta. Si leés mis primeros posts vas a encontrar imágenes y comentarios de esta ciudad que tal vez te resulten conocidos.

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